**La Moda de la Resiliencia**

Día 1: Hoy he decidido comenzar un diario. Después de meses de tratamiento, me siento un poco más fuerte. La moda siempre ha sido mi pasión, pero en los últimos tiempos, la enfermedad me ha robado el deseo de vestirme con estilo. Mirando mi armario, veo una mezcla de ropa que solía amarme, pero que ahora parece ajena.

"¿Por qué no usas esa blusa colorida?", me preguntó mi madre esta mañana. "Te haría ver radiante". La miré con una mezcla de tristeza y renuencia. La blusa, un regalo de mi mejor amiga, representa un tiempo en el que me sentía viva. Tal vez, solo tal vez, sea hora de darle una oportunidad.

Día 3: Hoy he salido a comprar un par de zapatos nuevos. Me arriesgué y elegí unos de color rojo brillante. Mientras los llevaba, noté cómo la gente me miraba. En ese momento, entendí que la moda no es solo ropa; es una forma de expresión. Me sentí empoderada, como si cada paso fuera un recordatorio de mi fortaleza.

Al regresar a casa, decidí probarme la blusa colorida. Al mirarme al espejo, sentí un destello de confianza. "¡Mira a esa mujer!", pensé. Es increíble cómo un simple atuendo puede cambiar tu perspectiva.

Día 5: Hoy, por primera vez en mucho tiempo, asistí a una reunión con amigos. Llevaba mi blusa colorida y los zapatos rojos. La conversación fluyó y, sorprendentemente, compartí mi historia. "La moda me ha ayudado a sanar", les dije. "Es una forma de mostrar que, a pesar de todo, estoy aquí y soy fuerte".

Al final de la noche, uno de mis amigos, Diego, me miró y dijo: "Isabel, tu luz ha regresado". En ese instante, comprendí que la moda no solo es superficial; es una manifestación de nuestra resiliencia. Estoy lista para abrazar la vida nuevamente.